¿Habéis escuchado alguna vez hablar de los niños índigo?
Se trata de niños con un estado superior de conciencia que, especialmente a partir de los años 80, empezaron a llegar a nuestro planeta. Estos niños nacen en todo tipo de familias y de clases sociales, pero comparten algunas características:
– Son más sensibles y justos que los otros niños. No toleran que se les imponga una autoridad incuestionable sin explicaciones ni lógica.
– Aborrecen la manipulación y la mentira. No les gusta la gente deshonesta.
– Son muy conscientes de quiénes son y no tienen problemas de autoestima.
– Son muy nobles.
– Necesitan utilizar su creatividad y en el colegio se aburren si les imponen métodos de enseñanza a la antigua usanza.
– Son impacientes y nerviosos.
– Suelen tener pensamientos espirituales.
– Algunos son vegetarianos y rechazan la carne desde edades tempranas.
– Son generosos y sienten empatía por los demás.
– Su mirada normalmente es profunda y parecen muy sabios pese a su juventud.
– No juzgan a los demás.
– Son muy perceptivos. Pueden incluso tener habilidades psíquicas.
Se les llama niños índigo porque su aura es de color azul. Esto se estipula en el libro «Understanding life through colour» de Nancy Ann Tape.
¿Y vosotros? ¿Creéis que habéis conocido a algún niño índigo a lo largo de vuestras vidas?
Actualmente se habla de los Niños Cristal, que vienen a este mundo para continuar el camino de evolución iniciado por los niños índigo, de hecho, muchas veces se trata de los hijos de estos.
Sea como fuere, este mundo es un lugar que necesita un cambio importante y no importa cuál sea el color de tu aura si estás dispuesto a realizarlo 🙂
Photo: Derek Davalos