La llegada de Júpiter a Capricornio es inminente y marca el comienzo de 12 meses en los que la suerte favorecerá a todos aquellos que madruguen para salir a buscarla.
El próximo 2 de diciembre, el mismísimo planeta de la fortuna, el buen rollo y la expansión, o sea, Papá Júpiter, llega a las tierras de la cabra montesa, donde permanecerá hasta el 19 de diciembre del 2020. Justo acaba de completar un ciclo anual en el que se ha sentido muy cómodo asentado en su domicilio (Sagitario). Desde allí ha prodigado favores y sonrisas de manera imparcial, favoreciendo sobre todo a aquellos que se arriesgaban y mostraban confianza en lo que está por venir.
Ahora la cosa cambia de arriba a abajo. Y es que Júpiter en Capricornio se vuelve mucho más tacaño y exigente. Por lo que únicamente otorga sus favores a aquellos que se lo curran de verdad. Así que olvídate de rezar y esperar a que las cosas caigan del cielo, porque NO será así. Dicen que las musas tienen que encontrarte trabajando… y a partir de ahora (por lo menos de momento) la diosa fortuna también espera verte hincando el codo y sudando la gota gorda. No basta con desear y visualizar, sino que habrá que poner toda la maquinaria en movimiento. De lo contrario, olvídate de obtener ayudas inesperadas. 2020 es el año de los currantes y los madrugadores, el año en el que la fábula de la cigarra y la hormiga cobrará sentido para muchos de nosotros.
Así que dad por sentado que vamos a oír muchas quejas de personas lamentando que la suerte les ha abandonado… En realidad son aquellos con escasa o nula capacidad de resiliencia, que sienten la tentación de tirar la toalla cuando se encuentran la primera piedra en el camino. Sin embargo, aquellos que están demasiado ocupados para lamentaciones porque andan labrándose un porvenir, y se comprometen al cien por cien por sus sueños, encontrarán pequeños golpes de suerte en cada esquina.
Y es que, seamos honestos: Júpiter en Capricornio no es pródigo y se hace mucho de rogar. Al fin y al cabo es Júpiter en plena caída, donde más le cuesta expresar su naturaleza generosa. Pensad en el animal que nos remite al arquetipo de Capricornio y lo entenderéis todo: La vida de la cabra montesa no es sencilla. Su hábitat es árido; la climatología de las altas cumbres, muy dura; y por allí resulta harto complicado encontrar vegetación y compañía. Normal que se le haya curtido la piel y no esté para tonterías… Pero donde otros se despeñarían ante el primer resbalón, ella salta con destreza y salero. Y es que la cima no está hecha para todos, sino que es un lugar reservado para aquellos que están dispuestos a pagar el precio.
Así que pregúntate cómo de comprometida estás con tus sueños y el esfuerzo que emplearás en hacerlos realidad. Porque no solo es Júpiter quien nos invita al trabajo duro, sino que Saturno y Plutón también transitan por las cumbres capricornianas, haciendo que en determinados momentos del año, hasta cinco planetas se den cita en las más altas esferas. ¡Eso es un chute de energía potente!
Así que al final, tu éxito solo depende de lo dispuesta que estés a intentarlo e insistir. La puerta hacia tus sueños no es otra que la perseverancia. Quédate esta clave en la cabeza y el 2020 será infinitamente más provechoso.
4 comentarios en «Júpiter en Capricornio. Forjar la suerte»
Me interesa todo lo relacionado con la astrología y la perspectiva desde la analizas
Hola Luna!
¿Cómo influirá esto a los nacidos con Júpiter en Capricornio?
En mi caso en casa 9
Gracias!
Es el Retorno de Júpiter, un nuevo ciclo de socialización y abundancia.
Gracias maestra Luna 🙂
Para quienes tenemos júpiter en capri es retorno, con que palabras conectarías júpiter en casa cuatro?
un abrazo y gracias por tus nutritivos escritos que siempre aportas